Por Dannerys Arias Ramirez
Cuenta la historia que en una ocasión unos jóvenes ejecutivos aventureros, se fueron de alpinismo a las montañas de los Alpes (de ahí se deriva el nombre de ese deporte entretenimiento); como jóvenes al fin, les encantaban las aventuras, máxime si estaban acompañado de algo que no le imponía limites para viajar por el mundo (el dinero).
En esas montañas Europeas, tuvieron una gran experiencia que los marco para toda la vida; en su trayectoria hacia la cima encontraron un objeto misterioso de la era prerromana que se asemejaba a un báculo que emitía sonidos desde su interior; conjuntamente decidieron trasladarlo a su país de origen y examinarlo mejor en su oficina ejecutiva.
Al llegar a su país de origen el báculo empezó a emitir sonidos entendibles; al parecer el mencionado báculo tenía la peculiaridad de adaptarse al idioma del lugar en que se encontraba. De repente y ya en la oficina de los ejecutivos, el báculo empezó a hablar; ellos comprendieron que se trataba de algún genio o deidad encerrado en el báculo.
De manera sorpresiva esa mañana el báculo que solo les manifesto que puede cumplir dos deseos a quienes estaban presentes y luego iba a no tener poderes hasta tres mil años después y que esas dos peticiones que podía conceder, era darle Quince Millones de pesos o Quince millones de amigos leales.
Para resumir esta historia Dannerystica; de los seis jóvenes ejecutivos, que siempre piensan en el dinero y que no podían desperdiciar esa oportunidad y también porque pensaron que van a hacer con amigos; ya que ellos los tienen muchos; mejor se inclinarían por el dinero para así obtener ganancias y vivir una vida más holgada; cinco se inclinaron por el dinero; solo uno acepto tener los quince millones de amigos leales.
Mientras los cinco se burlaban de la mala elección del compañero que eligió los quince millones de amigos leales; sucedió que estaban indagando en sus cuentas bancarias y en cada una de las cuentas de los cinco, instantáneamente aparecieron los quince millones de pesos.
Y ese mismo día el que eligió los quince millones de amigos leales; su móvil, sus redes sociales, su hogar, su oficina, se lleno de afectos, saludos, apretón de manos, mensajes positivos, palabras de respaldo e incentivadoras; mientras los otros se burlaban de él.
A toda una semana de contacto con sus amigos leales y mientras sus amigos disfrutaban del dinero otorgado por el báculo; al joven ejecutivo se le ocurrió llamar a todos sus amigos leales y pedirles a cada uno de sus quince millones de amigos leales, la cantidad de solo cinco pesos y en cuestión de dos días obtuvo, Setenta y cinco Millones de pesos; luego decidió abrir un centro comercial y les dijo a sus quince millones de amigos leales que compren en sus tiendas y sus ganancias en un año se incrementaron a Trescientos millones de pesos.
Se le prendió de nuevo el bombillito y decidió incursionar en la política y les pidió de favor a todos sus amigos leales que voten por él; Gano la presidencia de la Republica.
Hoy en día sus cinco amigos esperan en los pasillos del palacio Nacional para ver si les puede dar o aprobar algún financiamiento estatal para llevar a cabo un proyecto; ya que no cuentan con los recursos suficientes para ejecutarlos.
En deducción: ¿cual es más importante el dinero o los amigos leales?
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